La increíble experiencia de volar en una Suite de Singapore Airlines por $280,000 pesos ✈



Rankeada entre las mejores compañías aéreas del mundo, Singapore Airlines tiene una Primera Clase espectacular que resulta infinitamente mejor en las Suites de los A380: cabinas privadas, camas comodísimas para dormir, atención personalizada y un menú en tierra y en el aire en el que se puede encontrar desde un solomillo al estilo Nueva York o un costillar de cordero asado. Una experiencia que han vivido, por ejemplo, Leonardo DiCaprio o Morgan Freeman, quienes utilizaron varias veces este servicio. ✈




A puertas cerradas, la clase Suite ofrece silencio y privacidad (Singapore Airlines).

Las Suites son cabinas individuales diseñadas por Jean-Jacques Coste -especializado en yates de lujo- y buscan crear un entorno íntimo y acogedor. Tienen puerta corrediza y persianas. Si se viaja en pareja, las suites adyacentes se pueden convertir en un cuarto doble. Se espera que en 2017 la compañía introduzca algunos cambios en esta clase.

Actualmente, las Suites están disponibles en los vuelos realizados con aviones A380 a París, Sidney, Tokio, Frankfurt, Nueva York, entre otros destinos. Un vuelo entre Nueva York y Singapur con escala en Frankfurt cuesta unos 14.000 dólares.

Experiencia en primera persona


Tras acumular muchas millas, Derek Low -ingeniero y youtuber- pudo adquirir un pasaje en la clase Suite, de Singapur a Nueva York. Y contó paso a paso su experiencia, registrando con fotos cada momento, cada detalle.

El día del vuelo, llegó al aeropuerto Singapore Changi y, para hacer el check in, fue al lujoso salón especial para los pasajeros de Primera Clase y Suite.

  Salón para pasajeros de Primera Clase y Suites.

Como si fuera un hotel cinco estrellas, lo recibió un botones y le llevó el equipaje. En ningún momento le pesaron la maleta.

Salón para Primera Clase y Suites (Derek Low).

No tardó en tener en sus manos el "billete de oro" de la aerolínea.

Billete de oro de Singapore Airlines (Derek Low).

También recibió una invitación para la Sala Privada. No era para menos, ya que la clase Suite es superior a la Primera.

Invitación a la sala privada (Derek Low).

Luego de dejar atrás los dos salones de la clase Business y de Primera y, acompañado por tres asistentes distintas, llegó a la Sala Privada de Suite.


Sala privada de Singapore Airlines (Derek Low).

El personal del lugar lo saludó por su nombre y tomó champán.
Sala privada de Singapore (Derek Low).

Aunque no tenía hambre, pidió un plato de satay de pollo y cordero.


Satay de pollo y cordero (Derek Low).

Después pidió una langosta y una hamburguesa con foie gras, hojas rúcula y un huevo de codorniz frito, y un jugo de mango.

Hamburguesa de carne con Foie gras, hojas rúcula y un huevo de codorniz frito (Derek Low).

Un asistente de vuelo lo acompañó hasta su suite.

Las suites de Singapore Airlines (Derek Low).

Derek eligió la suite del medio, que permite unir con la suite de al lado para formar una cama doble.


Las suites de Singapore Airlines (Derek Low).

Una copa de Dom Pérignon, los diarios y la presentación en persona de la tripulación. Y luego, a su disposición, auriculares de Bose y un kit de Salvatore Farragamo (incluía una colonia). Además, le ofrecieron mantas, almohadas, pantuflas y pijama Givenchy.
Kit de Salvatore Ferragamo (Derek Low).

Derek tomó un sofisticado café, un té TWG’s Paris-Singapore con bolsitas de algodón cosidas a mano y una cena de 5 platos.

En su suite (Derek Low)

Como aperitivo empezó con caviar Malossol, ensalada de langosta e hinojo.

Caviar Malossol con ensalada de langosta e hinojo (Derek Low).

Eligió una sopa de pescado como primer plato y una crema bávara de vainilla con coulis de frambuesa como postre. Después de la cena, recorrió parte del avión A380, subió las escaleras hacia la clase Business y bajó una escalera de caracol a la clase Economy.


Escalera en el A380 para visitar las otras clases (Derek Low).

Los asistentes de vuelo de Singapore Airlines transformaron su suite en un dormitorio y, como la suite de al lado estaba vacía, bajaron el separador y armaron una cama doble.

Mirando una película, en la cama doble de la Suite (Derek Low).

Si la habitación es grande, el baño no se queda atrás. Tiene una tapa que se levanta y sirve como asiento para que el pasajero pueda cambiarse.


El confortable baño de la Clase Suite (Derek Low).

Al despertar y desarmar la cama, el muro vuelve a levantarse y divide a las suites del medio.
La clase Suite de Singapore Airlines (Derek Low).

El avión hizo una escala en Frankfurt (Alemania) de 2 horas y los 3 pasajeros de que viajaban en la Clase Suite (tiene capacidad para 12) fueron acompañados al salón Lufthansa Senator que tenía un spa y una ducha caliente.

De vuelta en el avión, una nueva tripulación estaba a bordo para el viaje a Nueva York. Y aunque en esta ocasión, la cama era single, también le resultó muy cómoda. 

La cama single también es muy cómoda (Derek Low).
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